top of page
Gestión de las relaciones interpersonales

El universo de personas con quienes hemos de tratar en nuestra cotidianidad puede ser amplísimo: padres, hermanos, hijos, abuelos, cónyuge, amigos de toda la vida, nuevos amigos, compañeros y jefes de trabajo, compañeros de estudio, compañeros de viaje, clientes...  Y, a veces, puede resultar difícil relacionarnos con quienes hemos de convivir.

 

Comprender tanto los juegos de poder y/o cooperación como la vinculación emocional que se reflejan el el aspecto relacional de nuestras comunicaciones ayuda a mejorarlas y a tomar decisiones adecuadas sobre su continuidad.

 

Por ello, tener conocimientos sobre cómo entender la situación de comunicación en la que participamos considerando los aspectos verbales, no verbales y relacionales de la comunicación, además de aprender técnicas asertivas para dar respuestas eficaces dependiendo si la relación se caracteriza por la manipulación, la persuasión, el consenso, el cuidado, la agresión sutil u otras, nos permitirá comunicarnos con nuestros interlocutores respetando los derechos de todos, pero sobre todo, el derecho a nuestra dignidad y expresión genuina.

Un empleo adecuado de la comunicación nos permitirá: 

- Dar precisión a nuestros mensajes, conectándolos más directamente con nuestra intención real y nuestros objetivos, dejando de lado las suposiciones. De esta manera, nos relacionamos en base a la realidad, no a los prejuicios.

- Entender mejor la posición y las necesidades de la otra persona, sin necesidad de identificarnos con ella, viendo la situación desde una perspectiva de conjunto.

- Mejorar las relaciones con familiares y con personas cercanas, ya que incluimos flexibilidad en la manera de verlas y abordarlas.

 

- Desarrollar la firmeza que da el uso de las habilidades asertivas, deshaciendo situaciones que antes nos resultaban ansiógenas.

- Ser prácticos y efectivos a la hora de relacionarnos con personas tóxicas y manipuladoras, manteniendo los términos de la relación en unos parámetros que no nos resulten dañinos, o dando los pasos firmes para finalizarla.

- Gestionar mejor nuestro sistema emocional para volverlo un instrumento más útil y poderoso en el vínculo con nuestros semejantes.

Hay un gran abanico de mejoras que el desarrollo de las habilidades de comunicación, de la empatía, de la asertividad, del conocimiento emocional y de las otras habilidades relacionales, nos permite conseguir.

bottom of page