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Pasatiempo

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Cuando éramos niños 
los viejos tenían como treinta 
un charco era un océano 
la muerte lisa y llana 
no existía 

luego cuando muchachos 
los viejos eran gente de cuarenta 
un estanque era el océano 
la muerte solamente 
una palabra 

ya cuando nos casamos 
los ancianos estaban en cincuenta 
un lago era un océano 
la muerte era la muerte 
de los otros 

ahora veteranos 
ya le dimos alcance a la verdad 
el océano es por fin el océano 
pero la muerte empieza a ser 
la nuestra.

Mario Benedetti
Crisis de mediana edad

El término crisis de mediana edad se usa para describir un periodo de cuestionamiento personal que, según parece, en la cultura occidental ocurre al alcanzar la mitad de la edad que se tiene como expectativa de vida.

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En este periodo la persona percibe de alguna manera que ha pasado la etapa de su juventud y ha entrado en la madurez. Entonces empieza a cobrar forma la percepción de la muerte, la fecha de caducidad de la propia vida.

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Este momento se puede aprovechar como un tiempo de reflexión y revaloración, cuyo resultado puede reflejarse en el deseo de hacer mejoras significativas en aspectos clave de la vida personal tales como la carrera, las actividades del día a día, las aficiones, el matrimonio, las relaciones personales, la implicación activa en las dinámicas sociales (política, voluntariado, asociacionismo...)  o, en otros casos, la relación con la propia sexualidad, la comunión con la naturaleza, la espiritualidad o la actitud ante la vida.

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En cualquier caso, no es una enfermedad ni un trastorno en sí misma (aunque puedan haber trastornos psicológicos asociados) sino una fase personal, que se puede vivir con mayor o menor intensidad y de la cual se puede sacar provecho.

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La ayuda psicológica es una herramienta muy útil para cruzar el umbral hacia esta etapa, hacer duelo por la vida que se deja atrás y balance de lo que nos han aportado nuestras experiencias, preparándonos para transitar por la nueva etapa que se nos abre.

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